Hoy me tropiezo con unos datos estremecedores que publica El Mundo y que me hacen reflexionar. Según este diario y basándose en el ministerio de sanidad, desde el inicio de la pandemia y hasta el 24 de diciembre, en España se han producido:
1.854.951 casos confirmados con prueba diagnóstica de infección activa
49.824 víctimas mortales con test positivos.
Las cifras son terroríficas, pero este diario sigue citando datos de todas las comunidades autónomas sin ofrecer ninguna comparativa y yo sí voy a hacerla.
Como bastantes medios subvencionados saben enredar y, en su deseo de confrontar con el Gobierno Central, hablan mucho del "milagro de Madrid" como ejemplo de gestión en su comunidad autónoma, estas son las deducciones que yo planteo para quien quiera analizarlas. Para ser breve y evitar alguna interpretación errónea, solo voy cotejar datos de tres comunidades gobernadas por el mismo partido político.
COMUNIDAD MADRID: Población 6.663.394 hab.; Extensión: 8.028 km2
Casos confirmados: 385.625; Muertes: 11.687
ANDALUCIA: Población: 8.414.240 hab.; casi 2 millones más que Madrid
Extensión: 87.599 km2; casi 11 veces mayor que Madrid
Casos confirmados: 257.755 : esto es,127.870 menos que en Madrid.
Muertes: 4.950; esto es, 6.737 menos que Madrid = -236%
CASTILLA-LEON: Población: 2.399.548 hab.; 4.263.846 menos que Madrid
Extensión: 94.224 km2; 86.196 más que Madrid
Casos confirmados: 130.570 ; (255.055 menos que Madrid)
Muertes: 5.021, esto es 6.666 menos que Madrid = -232%
En resumen, cualquier lector imparcial puede fácilmente deducir que en Andalucía (mucho más extensa y más poblada que Madrid) se han producido la mitad de contagios y de muertes. Y que en Castilla León (más extensa pero menos poblada que Madrid) solo se han registrado la mitad de muertes.
A pesar de estos datos tan concretos, la mayoría de los medios subvencionados (prensa, radio y televisión) insisten en mostrarnos a Madrid como un gran ejemplo de gestión gubernativa; arrojan sombras sobre otras comunidades y silencian el porcentaje enorme de muertes producidas en las residencias de mayores de esta comunidad.
Y uno se pregunta: a qué esperan las autoridades sanitarias y judiciales para tratar de saber la verdad y el exceso de tantas muertes. Aunque algunos medios digitales (Infolibre, sobre todo) están investigando lo ocurrido y afirman que desde el Gobierno de la comunidad madrileña se dieron indicaciones protocolarias para no derivar a los enfermos mayores de 75 años hacia los hospitales. Tremebundo.
Todo está por ver. Lo único que parece estar claro es que Madrid no ha sido un ejemplo en la gestión de la pandemia. Y el único milagro que se ha producido es que todavía ningún responsable esté ya camino de los juzgados.
Teniendo en cuenta que el responsable, en última instancia, de las residencias de ancianos es el vicepresidente segundo del gobierno, efectivamente debería haber sido juzgado ya, y me temo muy mucho que la prensa, la radio y la televisión afínes al gobierno central, más del noventa por ciento de los medios, van a seguir sin exigir que la fiscalía del Estado lo lleve ante los tribunales.
ResponderEliminarTeniendo en cuenta que la Justicia en España no cumple bien con su cometido cuando se trata de juzgar a los de arriba, no será extraño que ni vice del central ni la presi autonómica y demás responsables pasen por los tribunales.
EliminarGracias por leer, pensar y opinar.
Hace meses que quedó dilucidada, con papeles, luz y taquígrafos, la responsabilidad de la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid en la gestión de las residencias de mayores.
EliminarA primeros de diciembre, en sede parlamentaria, Encarnación Burgueño (hija del ideólogo de la privatización sanitaria madrileña por el PP y enchufada por Ayuso para medicalizar residencias) puso de manifiesto la actuación criminal de la Consejería de Salud y del gobierno de Ayuso.
Esto ha salido en todos los medios nacionales e internacionales (el 80% de los nacionales, ardientes defensores de la derecha del PP, de la ultraderecha de Casado y de la Extrema derecha de Vox), lo que hace suponer que el señor o señora Galván tiene un importante déficit de comprensión lectora o, mucho peor, es ferviente cómplice de los responsables de la matanza administrativa llevada a cabo en las residencias geriátricas.
La señora Ayuso tuvo la desvergüenza cristiana de permitir el traslado sólo de los pacientes mayores que eran beneficiarios/as de seguros sanitarios privados. Para el resto, había orden de no moverlos si eran dependientes o padecían patologías graves. Tan criminal es ella y su gobierno como aquellas personas que insistís en manipular la verdad movidas por el odio desforado y antidemocrático que agitan Casado y Abascal.
Póngase, Galván, la bandera por capa y asista a misa con la conciencia bien tranquila: ha cumplido usted con el deber patriota de acusar a sabiendas de que miente para salvar a SU patria. Sólo le falta firmar el manifiesto para que nos fusilen a los 26.000.000 de patriotas que no pensamos, por suerte, como usted y los suyos.
Hola, Alfonso:
ResponderEliminarAntes de recibir tu correo sobre los "comentaristas", había iniciado una respuesta a tu artículo que dejé a medias por razones de horario.
Ya te dije que mi relación con Lucena Hoy acabó cuando este medio decapitó la Libertad de Expresión para proteger, encubrir y blanquear a un partido tan miserable y antidemocrático como Vox. Allá Lucena Hoy con su poder y su ética informativa.
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Madrid: 840 habitantes por Km2. Andalucía: 97 h/Km2. Castilla y León: 25/h/Km2.
Nobleza obliga a tener en cuenta un dato demográfico fundamental a la hora de comprender y explicar la pandemia, dado que la transmisión se lleva a cabo por cercanía entre las personas y una de las principales medidas preventivas es el llamado distanciamiento social.
La densidad de población puede explicar en parte la alta concentración de infecciones en una de las comunidades más densas, ya que la acumulación humana es inevitable en lugares públicos como calles, plazas, comercios o transporte, sobre todo si sus responsables políticos la fomentan, aplauden y jalean.
Aclarado el dato, hay que considerar que el mayor agravante de la situación en Madrid ha sido y sigue siendo la utilización política de la pandemia por parte de los tres partidos que componen los gobiernos autonómico y municipal como arsenal y trinchera para oponerse al gobierno legítimo y democrático de la nación.
Ciudadanos se ha visto cogido entre la pinza formada por la ultraderecha de Casado y la extrema derecha de Abascal. Con las primeras víctimas cosechadas por las políticas de (des)control del gobierno de la Comunidad, fueron descalificados y apartados los cargos públicos de este partido que osaron contradecir a una presidenta incalificable desde el punto de vista intelectual, humano y político.
El Partido Popular, siguiendo las instrucciones recibidas por Casado de la FAES, ha centrado su acción política durante toda la pandemia en culpar al gobierno legítimo y democrático de la nación y en los habituales fuegos artificiales cuya traca final ha sido la fraudulente construcción del corrupto almacén de contagiados con el que Ayuso y los suyos han deshonrado el nombre de la enfermera Isabel Zendal y pisoteado una vez más la Sanidad Publica.
Tanto Almeida como Ayuso han pasado de ser los responsables políticos de la ciudad y la Comunidad de Madrid a ser a ser los (i)responsables de alentar a los madrileños a mantener actitudes nocivas para la salud personal y colectiva: desde el desprecio hacia las mascarillas, hasta el fomento de las concentraciones humanas sin mantener las distancias extendiendo la idea de que “no pasa nada” y la de hay que salvar la economía antes que las vidas humanas.
En cuanto a Vox, su manipulación populista de la pandemia ha consistido en la misma receta exhibida por todo el fascismo europeo en países como Alemania, Francia, Italia, Polonia, Hungría, etc.: negacionismo, kale borroka y petición de “Libertad”, palabra que en sus bocas evoca el letrero que presidía las entradas a los campos de concentración nazis: “El trabajo os hará libres”.
Esta santísima trinidad grosera, mentirosa, manipuladora, dañina y peligrosa, es la máxima responsable de lo que viene sucediendo en Madrid, desde la insostenible presión sanitaria hasta el holocausto vivido en las residencias de mayores, donde el gobierno de Isabel Díaz Ayuso impartió órdenes de no trasladar a hospitales a residentes “poco recuperables” a no ser que tuviesen seguro privado, ocultó cadáveres a las fuerzas de seguridad y aplicó su particular eutanasia meses antes de ser aprobada por el gobierno legítimo y democrático de la nación.
Por lo demás, amigo Alfonso, no te extrañe la agresiva y sectaria actitud mantenida por los profesionales del comentario en redes y medios: es su trabajo y su fe militante. Tampoco te extrañe la actitud contemporizadora y permisiva por parte de los medios donde vierten sus exabruptos: están la mayoría, con escasas y honrosas excepciones, alineados en la misma trinchera de esas derechas que pagan sus anuncios y sostienen a sus propietarios.
Una vez más tu comentario me deja admirado y admirándote. Esto me compensa aquellos otros que recibo critiçandome con falsedades como de que escribo a sueldo de algún partido.
EliminarGracias por leer, pensar y opinar.