lunes, 29 de julio de 2013
VALORES Y BAJEZAS
Expansión mundial ha tenido la terrible noticia ocurrida en España con motivo del accidente ferroviario de Santiago, cuyo fatídico saldo de víctimas roza la cifra de 80 muertos y más de 100 heridos, todos de importancia.
En la convulsa España actual, con cientos de políticos corruptos de todos los partidos y cuestionados altos estamentos como la Corona y el Tribunal Supremo, ha resultado admirable la ola de solidaridad que inmediatamente se puso en marcha.
Vecinos del pueblo, bomberos que dejaban su huelga, médicos despedidos, donantes de sangre anónimos, hoteles ofreciendo alojamiento gratis para familiares. Toda España ha aparcado sus justas quejas y problemas para volcarse con las víctimas. Hasta ahí, todo son valores digno de elogio.
Pero resulta desolador comprobar las dos caras tan distintas que muestra la condición humana, en la que nunca faltan bajezas indescriptibles como las que hoy mismo son noticia en la prensa:
Un hombre ha sido detenido por tratar de aprovecharse de la tragedia ferroviaria inventándose ser la pareja de una mujer embarazada fallecida. Su objetivo era, al parecer, ser aceptado como tal para beneficiarse del posible seguro económico que ampara a víctimas o familiares. Sus explicaciones no convencieron a las autoridades que indagaron sobre su identidad, comprobando que tenía antecedentes por hurto, apropiación indebida y estafa. Menuda pieza.
Leo en la misma página otra noticia que me hace recelar mucho de las bondades de la condición humana. Una pareja ha sido detenida por intentar pasar por la aduana de Melilla a una menor de 13 años, oculta en una maleta dentro del coche. No era un familiar, por lo que se deduce que posiblemente les hacían el pase al "paraíso europeo" a cambio del módico peaje de 2.000 euros. La menor fue rescatada a punto morir de asfixia y el matrimonio ha sido puesto a disposición judicial. ¿Solidaridad o explotación?
Y por último, otra bajeza repulsiva. El Gobierno NO ANULARÁ el indulto que le concedió a un kamikaze automovilista condenado a 13 años de prisión por haber ocasionado la muerte a un joven que circulaba en dirección correcta por una autopista de Valencia. Aunque el indulto lo gestionó el bufete donde trabaja el hijo del ministro de Justicia, el Gobierno afirma que adoptó esta "medida de gracia" basándose en "la información penitenciaria" y sin que nadie influyera en la decisión. Y aún más. Para dejarlo libre de antecedentes, Tráfico le ha anulado y devuelto los 360 euros de multa que, por conducción peligrosa, le fue impuesta al kamikaze dos años antes del último episodio mortal. ¿Cabe mayor vileza?
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Una vez más, Alfonso, leo con deleite lo que escribes y me admiro de tu perspicacia para analizar los temas. Es muy cierto que el ser humano es capaz de bajezas, casi innombrables, al mismo tiempo que atesora valores como los mostrados ente la desgracia del accidente ferroviario acaecido. Tal vez sea la mezcla de barro y espíritu que insufló el Sumo Hacedor al crear la especie humana. De las tres noticias que empleas para significar la bajeza humana, sin que justifique ninguna, opino lo siguiente:
ResponderEliminar1ª.- Es una muestra más de nuestra ancestral picaresca.
2ª.- Denota que, por dinero o poder, el hombre no tiene cortapisas.
3ª.- Me parece la más deleznable de todas, porque la cometen quienes han de gobernarnos y, ¡qué casualidad!, planea, para conseguirla, la sombra del ministro de justicia y su familia.
No obstante, hoy he leído en un periódico, atribuida al Papa Francisco, la siguiente frase: «En la curia hay muchos santos: cardenales santos, obispos santos; gente de Dios que ama la Iglesia, pero eso no se ve mucho». y me ha reconfortado bastante. Quiero trasladar este pensamiento a la sociedad y pensar que hay mucha más gente buena y generosa, aunque esa multitud sea menos "noticia" que los mezquinos y aprovechados. Hoy, insisto, voto por la confianza en nuestra especie.
¡¡De nuevo, Enhorabuena por tu artículo!!
M. Poyato.
Este comentario es tan analítico y tan didáctico que me siento muy honrado y creo que complementa y mejora con creces lo expuesto en mi artículo. Gracias por leer y por pensar y por aportar confianza en este trance.
EliminarValores y bajezas...!
ResponderEliminarComo bien dices, querido Alfonso, se trataría de las dos caras, tan distintas, de la condición humana. Y por tanto, casi parte intrínseca de nuestra manera de ser...
Efectivamente y desde que el mundo es mundo, Caín y Abel, David y Goliat, Jesús y Judas, ladrón bueno y ladrón malo... siempre han estado ahí. Como las dos caras de una misma moneda. Como si la una necesitara obligadamente de la otra... El ying y el yang, descritas como dos fuerzas fundamentales , opuestas y complementarias, pero que se encuentran en todas las cosas...
Explicada así la conducta humana, un cierto determinismo parecería, aparentemente, programar nuestro comportamiento, de forma que unos quedaríamos en el lado bueno y los demás, lógicamente, en el otro.
Lo cual evidentemente y desde mi punto de vista me llevaría al absurdo por cuanto, en términos generales, sigo siendo, en gran medida, dueño único de mis actos.
Tal vez por eso, como acertadamente decía el otro día "Verbarte" a raiz de los acontecimientos de Santiago, "el tren de la solidaridad ha circulado con una precisión y una velocidad muy superiores a la de cualquier AVE... El mundo conoce y aprecia la solidaridad española".
Ésa es la realidad, a pesar de ciertos desajustes o salidas de tono como las que a diario podemos escuchar. Y que deberían conformar la otra cara, no sé si obligada, de la moneda.
De cualquier forma, quienes caímos en el lado bueno de las cosas, quienes todavía nos sorprendemos ante comportamientos tan provocadores, hemos de seguir en nuestro empeño, inagotable, de seguir creciendo cada día.
Porque es posible...!
El esfuerzo en escribir merece la pena, aunque sólo sea por recibir comentarios tan valiosos como los que hoy se están haciendo. Gracias.
EliminarAmigo Alfonso: Al leer tu artículo sobre noticias de actualidad, que tan magistralmente has elaborado, me viene a la memoria el terrible atentado de la estación de Atocha de hace varios años. Me dirán que no es lo mismo, ya que lo de atocha fue provocado por un atajo de criminales salvajes y lo de ahora parece haber sido causado por la negligencia de una o varias personas. Los causantes de tanto dolor, ciertamente son muy distintos, pero las tragedias son similares y en las dos se ha puesto de manifiesto la solidaridad y bondad de la mayoría de los españoles, de lo que debemos sentirnos muy orgullosos.
ResponderEliminarEs verdad que hay muchos políticos corruptos; pero, como también habrá algunos decentes, no debemos meterlos todos en el mismo saco. Pensemos en Sodoma y Gomorra, que serían perdonados todos sus habitantes aunque hubiera sólo diez justos.
Pienso que hay muchas personas indignas de pertenecer a los humanos, pero somos muchos más los que caminamos con recta intención. Lo que pasa es que los de mala condición son más visibles, porque el daño que hacen es muy notorio.
Alfonso: todo tu escrito está repleto de tremendas realidades que comentas con tu habitual sabiduría. Te animo a que sigas escribiendo con asiduidad, porque tu manera de hacer lo merece.
Sé que tu gran capacidad intelectual evitará que afecte tu espíritu tanta maldad como en el mundo existe.
José García Moya.
Soy más bien pesimista, pero reconozco que hay que luchar contra el desaliento que nos afecta y daña especialmente a los jóvenes. Gracias por leer y por tu sincero comentario.
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